En un fallo dividido 14 a 13, los miembros del Juzgado Infantil de Garantía de Valdivia declararon culpable al Lobo Feroz de haber atacado sin justificación ni atenuantes a la abuelita de la Caperucita Roja y además de amenazar con comerse a la pequeña niña.
Con un final más justo que feliz, culminó la jornada educativa que se desarrolló en el Tribunal de Garantía de Valdivia, donde un grupo de niños del Primero C del Windsor School de Valdivia, concurrió a las dependencias de Avenida Francia, en el marco de una actividad de vinculación de este organismo del Estado con la comunidad.
Al juicio llegó el temido Lobo Feroz esposado y con resguardo de Gendarmería y al enfrentar al tribunal dijo en su defensa estar arrepentido de los daños causados a la abuelita (se la comió) y la cruel amenaza que profirió a la tierna Caperucita Roja cuando ella le preguntó inocentemente "por qué tenía la boca tan grande" y el lobo respondió: "¡para comerte mejor!".
Los argumentos de la defensa no fueron suficientes y la parte querellante consiguió que el tribunal infantil, compuesto por casi 30 pequeños jueces, declarara culpable al animal que por cientos años cargó con la sospecha fundada de haberse comido, sin causa justificada, a la abuelita de la pequeña Caperucita.
"La idea de la entidad es generar espacio de cercanía con la comunidad", dijo el juez Daniel Mercado, quien encabezó el simulacro de juicio al que asistieron también padres, apoderados y profesores. "Se les dio a conocer el tribunal a los niños, dieron un paseo y pudieron conocer la sala de audiencias con una pequeña representación con el lobo feroz, y así logramos conseguir que pusieran atención. Fue una linda experiencia", aseveró.
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